La “morocha”, es el prototipo de la mujer argentina, cabello oscuro, tez clara, figura esbelta, musa inspiradora de muchos tangos.
En estas pinturas, la morocha es una “mujer de la noche”, sola, cansada y bella. Recorre las calles empedradas, en un antiguo barrio de la ciudad, que bien podría ser San Telmo, exhibiendo su porte encantador y sus ojos tristes.
En estas pinturas, la morocha es una “mujer de la noche”, sola, cansada y bella. Recorre las calles empedradas, en un antiguo barrio de la ciudad, que bien podría ser San Telmo, exhibiendo su porte encantador y sus ojos tristes.